El autosabotaje se refiere a la tendencia de un individuo a frenar u obstaculizar su propio avance. Es decir, una persona que se autosabotea se encarga de interponerse a sí misma, debido a una serie de limitaciones mentales que le impiden alcanzar sus metas u objetivos.
Aunque parezca un sinsentido que alguien actúe de esta manera, la realidad es que el autosabotaje se produce de manera inconsciente. Pues se trata de una forma de exteriorizar temores o miedos profundos. La cual suele presentarse en momentos trascendentales que podrían implicar la consecución de ciertos logros, asumir grandes responsabilidades, u otros cambios importantes.
Para muchas personas el autosabotaje se convierte en su principal mecanismo de defensa. Pero ¿defenderse de qué?, pues de tener que salir de la zona de confort, donde los resultados son previsibles y la posibilidad de fracasar es menor. De esta manera se protege de posibles sufrimientos, o situaciones estresantes cargadas de incertidumbre.
Ciertamente es normal sentir incertidumbre en momentos en los que se requiera tomar decisiones importantes. Pues en esos casos nos vemos afectados por la incertidumbre, el miedo y la inseguridad. Emociones que todos experimentamos naturalmente en mayor o menor medida.
No obstante, cuando una persona deja que estas tomen las riendas de su vida, y en lugar de sobreponerse a pensamientos pesimistas o negativos. Permitiendo que estos le paralicen o incapaciten, impidiéndole lograr aquello que anhelan y por lo que han luchado mucho, entonces se dice que se está autosaboteando.
¿Por qué nos autosaboteamos?
Abandonar un proyecto a medio camino para no enfrentar un posible fracaso o equivocación. Procrastinar o retrasar indefinidamente las actividades o cambiarlas por otras que no representen ningún reto. Manifestar un perfeccionismo exagerado que impida culminar una meta, así como las excusas, son formas de autosaboteo. Pero ¿Por qué lo hacemos?
Una de las principales razones por las que te autosaboteas, es por la creencia limitante de no ser capaz de conseguir las metas que te planteas. O bien considerar no estar a la altura de las expectativas propias o de terceros.
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Tener una autoestima baja, así como sentir miedo o inseguridad ante la incertidumbre y no poder canalizarla o enfrentarla para que no controle nuestra mente genera una situación que probablemente derive en el autosaboteo.
Otra de las causas del autosabotaje o autoboicot, es la falta de motivación. La cual, al igual que la ausencia de objetivos o la imposición externa de metas crean el ambiente idónea para el estancamiento y la propia obstaculización.
Aceptar tus miedos y tomar consciencia de tus creencias irracionales, así como trabajar tu autoestima y motivación, son primeros pasos esenciales para superar el autosabotaje. Pero si no puedes hacerlo solo, no dudes en recurrir a un especialista que te brinde el apoyo psicológico necesario y/o solicitar ayuda de un coaching profesional.